NUEVA SECCIÓN: "QUE PEX CON TU TEX"

 UNA NOVELA QUE TE MARCARA DE POR VIDA

EL PERRITO

Mato sin pensar

Como se mata el tiempo leyendo un libro

Como se mata una mosca insignificante

Con rapidez y displicencia.

Mató porque vivir en matar.

Ángel Rocha

Déjame morir plagiario de ti.

Tristeza serial;

Los que conocen del amor

Saben de la pólvora de los ojos.

Antonio Salinas Bautista.

CAPITULO UNO “DE LA DESDICHA NO SE COME CON TORTILLAS”

Su casa ese montón de adobes, láminas. Pasar dentro, una mesa vacía, un olor a orines y rancio. Hace días que no aprobado bocado, en tres días se la ha pasado con agua y chemo como un desahuciado.

Su padre no tiene, nunca lo conoció la madre le dijo que ellos tenían que darle fregadazos a lo que viniera, nunca les dijo que la vida existía la palabra trabajo, la madre se iba al jale y los dejaba solos encerrados como perritos, esta no les dejaba comida, empezaron a salir a la calle a descubrir el mundo por sí mismos.

Le pusieron el perrito por la mancha de la cara, nunca supo su nombre ya que la madre pensaba llamarlo Fulgencio; al final en la cruda se le cruzaron los cables; solo se acordaba que terminaba en ENCIO, sería Crescencio, mejor decidió llamarlo “Cres” ya que todo lo hacía a medias, buscando la originalidad.

A este tampoco le gusto, ya que a uno nunca le preguntan cómo desea llamarse, más adelante agradecería mínimo no ponerle un nombre gabacho que andaban muy de modas, por eso le gusto que le dijeran el perrito, le gustaba ese apodo; el perro, tenía fuerza y vitalidad, el perrito de cariño para los conocidos y cómpas.

Continuará: